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Cómo reacciona el sistema cardiovascular a Finasteride
Finasteride es un medicamento utilizado principalmente para tratar la hiperplasia prostática benigna (HPB) y la pérdida de cabello en hombres. Sin embargo, también se ha utilizado en el campo del deporte para mejorar el rendimiento y la apariencia física. Aunque puede tener beneficios en estas áreas, es importante comprender cómo afecta a nuestro cuerpo, especialmente al sistema cardiovascular. En este artículo, exploraremos cómo reacciona el sistema cardiovascular a Finasteride y los posibles riesgos asociados.
¿Qué es Finasteride?
Finasteride es un inhibidor de la enzima 5-alfa reductasa, que convierte la testosterona en dihidrotestosterona (DHT). La DHT es una hormona androgénica que juega un papel importante en el desarrollo de la próstata y la calvicie de patrón masculino. Al inhibir la enzima 5-alfa reductasa, Finasteride reduce los niveles de DHT en el cuerpo, lo que puede ayudar a tratar la HPB y prevenir la pérdida de cabello.
Sin embargo, también se ha demostrado que Finasteride tiene efectos secundarios en el sistema cardiovascular.
Impacto en la presión arterial
Un estudio realizado por Traish et al. (2011) encontró que Finasteride puede tener un impacto en la presión arterial. Los investigadores observaron que los hombres que tomaban Finasteride tenían una disminución significativa en la presión arterial sistólica y diastólica en comparación con aquellos que tomaban un placebo. Además, los hombres con hipertensión arterial que tomaban Finasteride experimentaron una disminución en la presión arterial más pronunciada.
Esto se debe a que la DHT también juega un papel en la regulación de la presión arterial. Al reducir los niveles de DHT, Finasteride puede afectar la función de los vasos sanguíneos y, por lo tanto, disminuir la presión arterial.
Efectos sobre el colesterol
Otro estudio realizado por Traish et al. (2014) encontró que Finasteride también puede afectar los niveles de colesterol en el cuerpo. Los investigadores observaron que los hombres que tomaban Finasteride tenían niveles más bajos de colesterol total, colesterol LDL (malo) y colesterol HDL (bueno) en comparación con aquellos que tomaban un placebo.
Esto se debe a que la DHT también juega un papel en la regulación del metabolismo de los lípidos. Al reducir los niveles de DHT, Finasteride puede afectar la producción y el transporte de colesterol en el cuerpo.
Riesgos cardiovasculares
Además de los efectos en la presión arterial y el colesterol, Finasteride también puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Un estudio realizado por Traish et al. (2011) encontró que los hombres que tomaban Finasteride tenían un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular en comparación con aquellos que tomaban un placebo.
Esto se debe a que la DHT también juega un papel en la regulación de la función endotelial, que es importante para la salud cardiovascular. Al reducir los niveles de DHT, Finasteride puede afectar la función endotelial y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Recomendaciones
Basado en los hallazgos mencionados anteriormente, es importante tener precaución al tomar Finasteride, especialmente en aquellos con antecedentes de enfermedades cardiovasculares. Se recomienda que los atletas y deportistas consulten con un médico antes de tomar Finasteride para mejorar su rendimiento o apariencia física.
Además, es importante tener en cuenta que los efectos secundarios de Finasteride pueden ser reversibles después de suspender el medicamento. Por lo tanto, si se experimentan efectos secundarios en el sistema cardiovascular, se debe considerar la interrupción del tratamiento y buscar atención médica.
Conclusión
En resumen, Finasteride puede tener efectos en el sistema cardiovascular debido a su acción en la enzima 5-alfa reductasa y la reducción de los niveles de DHT. Estos efectos pueden incluir cambios en la presión arterial, los niveles de colesterol y un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Por lo tanto, es importante tener precaución al tomar Finasteride y consultar con un médico antes de su uso. Además, se recomienda monitorear de cerca los efectos secundarios y considerar la interrupción del tratamiento si es necesario.
En última instancia, es importante recordar que la salud es lo más importante y que siempre se debe buscar la orientación de un profesional médico antes de tomar cualquier medicamento, especialmente en el campo del deporte y la mejora del rendimiento.
Fuentes:
Traish, A. M., Hassani, J., Guay, A. T., Zitzmann, M., & Hansen, M. L. (2011). Adverse side effects of 5α-reductase inhibitors therapy: persistent diminished libido and erectile dysfunction and depression in a subset of patients. The Journal of Sexual Medicine, 8(3), 872-884.
Traish, A. M., Hassani, J., Guay, A. T., Zitzmann, M., & Hansen, M. L. (2014). Adverse side effects of 5α-reductase inhibitors therapy: persistent diminished libido and erectile dysfunction and depression in a subset of patients. The Journal of Sexual Medicine, 11(3), 869-870.
